Reflejos de mi alma 09: abril 2010

Acomoda tu mente, cuando te sientas
cansad@ , ansios@ deprimid@, cambia
tu estado de ánimo, RELAJATE, como?
respira profundamente hasta que tu
vientre se expanda, reten el aire tres
segundos, ahora expira, suelta el aire
por la boca, lentamente, vacía tus
pulmones desde lo más profundo,
nuevamente espera otros tres segundos
y respira nuevamente, vuelve a retener.
Después de repetir esta técnica, cuatro
o cinco veces, ya estas entrando a un
casi perfecto estado de RELAJACION
la podes realizar, sentad@ con la
espalda bien recta, o recostada
con las piernas, ligeramente separadas
en pocos minutos sentirás, nuevas
energías y un cambio radical en tu ánimo
PROBALO NO CUESTA NADA-

Krlos 21-4-2010

Hoy tengo el agrado, de publicar
un cuento de mi amiga Andrea,
lo escribió hace cinco años,
tiene un toquecito erótico
seguro les gustara. Krlos

EL ENCUENTRO
y que encuentro

Fue un encuentro casual.
Como todos los días ambos toman el
subte camino al trabajo, nunca se habían
cruzado antes, a pesar de estar a la
misma hora. Ella subía un estación
antes que él.
Como todas las mañanas él ingresa
al vagón un paneo general recorren
sus ojos y se ubica, a veces se sienta
otras ya no consigue lugar.
Esta vez se ubico parado y se apoyo
sobre una de las puertas del tren,
que no se usan en ese viaje de ida,
allí la vio con su trajecito de oficina,
esa pollera trepada a sus piernas,
y ese hondo escote provocando
una fantasía infinita.
Ella vio sobre la puerta un hombre
informal y terriblemente atractivo.
Ambos disimulaban esas miradas
de reojo.
Por fuera sus expresiones estaban
casi inmóviles, las sonrisas sensuales
y picaras la reprimían.
Quién de nosotros bajara primero?
Sentirá la misma atracción que yo?
El subte iba rápido el paisaje negro
obligaba a todos a verse entre si,
como siempre, pero esos cuerpos
no había mayor atracción que esos
dos cuerpos que se miran y no un
camino invisible se trazo en ese
camino, en el que ellos se iban
acercando, en el que los ojos
ahogaban al cuerpo del otro
y sintieron un cosquilleo aun
sin tocarse, con la sola presencia
y sin olerse todavía.
A ella le excitaba ese pelo revoltoso,
y esa mezcla de hombre informal
e intelectual. El veía ese escote que
lo llevaba a una imaginación infinita,
y esos ojos, esos ojos tan dulces y
seductores y encerrando una tencion
sexual a punto de estallar.
Se olieron los cuellos con los ojos
cerrados, esos aromas de perfumes
evaporado de ropa recién puesta y
de piel los trasportaban hasta no se
sabe dónde.
Se respiraban, se sentían aun sin
tocarse.
El acaricio la blusa pudiendo sentir
su piel, recorrió muy despacio con
su mano el cuello de ella, la oreja,
los pómulos, sus ojos cerrados,
la nariz, finalmente la boca.
su mano allí se detuvo, pudiendo
disfrutar de esos labios relajados.
Ella acaricio su hombro con mayor
precion después su espalda y su brazo
hasta llegar a la mano que apretó por
un largo rato como queriendo decir.
Se seguían oliendo mientras las manps
descubrían el mapa geográfico del
otro, los ojos continuaban cerrados,
las caricias trataban de ser delicadas
La ropa ahora molestaba, por debajo
de la remera ella toco su espalda
y lo apretó contra su cuerpo.
Sus labios se habían rozado demasiadas
veces ya. El calor corporal crecía,
se escuchaban la respiración que
era como el susurro de un acelerador
furioso.
Sus caras y sus narices se buscaban
hasta que una mirada decisiva empezó
a sacar las ropas de la escena, por cada
botón de la blusa, ella se exitaba, aun mas,
se veía en esos ojos cerrados,
en esos pechos que florecían.
La remera salió del cuerpo, y ella
descubrió un torso muy masculino,
con sus dedos hurgo el borde del
jean abrochado recorriendo toda
la cintura y en busca de mas,
desprendió su cinto , y fue soltando
cada botón metalico buscando asi,
de a poco, ese punto máximo,
sus ropas interiores, no tardaron
mucho mas en salir.
Los pechos estaban apretados contra
ese cuerpo mojado de calor.
Mesclaron sus olores, su traspiración
sus cabellos, estaban ya desnudos,
desnudos, desnudos sus cuerpos
desnudas sus almas.
Acontra luz el miraba esa silueta,
y esas curvaturas tan femeninas.
Ella devoraba esos hombros, esa
espalda que sus manos habían
descubierto anteriormente.
Ya no podían desprenderse,
parecían imantados.
La llevo contra la pared, y entre
sudores apresurados, entro en ella
tan suavemente, que más aun ella
ardía.
Querían que ese momento no terminara
se prolongue pero no podían.
Se movían en un perfecto vaivén
ascendente y descendente
Las pieles emanaban otros olores.
Sus manos, sus cuellos, todo
el cuerpo resbalaba, era un incansabl
deseo que de a poco se consumía.
El tiempo trascurrido no lo sabían
aunque el presente no duraría
mucho mas.
Ya no aguantaban controlar , ese
punto final, esa muerte sexual-
En una mezcla de instinto animal,
y de caricias humanas,buscaban
culminar juntos, a la par, ambos cuerpos
eran un mismo sentir, eran una misma
piel, un no pensar, un disfrutar un mismo
grito final.
Ella bajo en la estación siguiente,
cuando el despertó de ese sueño,
tan imaginado como real.

FIN

ANDREA 14-10-2005